19 Pero el Señor no ha elegido a la nación por el Lugar, sino el Lugar
por la nación.
20 Por esto, también el mismo Lugar, después de haber participado de
las desgracias acaecidas a la nación, ha tenido luego parte en sus beneficios;
y el que había sido abandonado en tiempo de la cólera del Todopoderoso,
de nuevo en tiempo de la reconciliación del gran Soberano, ha sido
restaurado con toda su gloria.